El río marcó un nuevo récord de bajante y advierten que el desove es irrecuperable
La altura fue ayer de 0,65 m. Es el nivel más bajo en 50 años. Recursos Naturales evaluará la afectación en la población de peces, que no cuentan con buenas condiciones desde mediados de 2018. Refuerzan controles y sanciones.

La bajante del río Paraná comenzó a mediados de 2019 y, más allá de algunos leves repuntes ocasionales, la situación sigue siendo crítica y genera preocupación la situación de los peces.
Según el registro de la Prefectura Naval Argentina, el nivel de ayer fue de 0,65 metros, el menor en 50 años, menos inclusive que el 0,72 m de 2020, por lo que se constituyó como un nuevo récord.
Así, la situación se agrava y hay alerta por la navegabilidad, que se ve restringida en estas condiciones, y por la fauna íctica, complicada hace ya varios años.
Entre otras cuestiones, se ve afectado el desove y, por ende, la reproducción.
Sobre esta situación, el director de Recursos Naturales de la Provincia, Carlos Bacqué, dijo ayer a República de Corrientes que “el desove no fue el ideal y a esta altura ya es irrecuperable, al menos hasta que el río vuelva a niveles normales”. Asimismo, el funcionario explicó que “cuando más agua hay, se genera una mayor correntada, y eso ayuda al desove, pero ahora la situación es otra”.
Según estiman desde el área de Recursos Naturales, la última puesta de huevos óptima que tuvieron los peces en el Paraná fue a fines de 2018, ya que la situación en 2019 comenzó a ser crítica, batiendo incluso varios récords de bajante antes que el que se dio ayer finalmente.
Nos vamos a reunir con especialistas
de la UNNE, que
es la que hace
las evaluacionesCARLOS BACQUÉ
DIRECTOR DE RECURSOS NATURALES
Ahora, buscarán avanzar en un trabajo de investigación para determinar el grado de incidencia que estas condiciones están teniendo con respecto a la población de peces en el río. “No creemos que sea algo extraordinario, pero seguramente que una afectación va a haber”, expresó Bacqué. Además, adelantó que “nos vamos a reunir con especialistas de la Universidad Nacional del Nordeste, que es la que realiza las evaluaciones”.
Si bien el surubí y el dorado suelen ser los más reconocidos, aseguran que todas las especies se encuentran hoy en riesgo, por lo cual se mantiene el esquema de veda, a pesar de algunos reclamos a comienzos de año. Es que, cuando en enero el río repuntó, Chaco avanzó sobre una apertura con la que Corrientes no se mostró de acuerdo, previendo que la situación volvería a empeorar.
“Dijimos que teníamos que ser cautelosos y el tiempo nos dio la razón. Hoy seguimos con el mismo sistema en el que los malloneros pescan solo de lunes a viernes y los deportivos no pueden hacerlo martes ni miércoles”, señaló.
Asimismo, avanzan con controles y sanciones, e impulsan incluso algunas presentaciones judiciales contra las personas que infringen la norma vigente, ya que representa un serio ataque al equilibrio ambiental, ahora en crisis.
Se espera que Yacyretá tome medidas y aumente el caudal del río. Con esto habrá un leve crecimiento, que facilitará la navegación, pero aclararon que, para los peces, resultará insignificante.


