Advierten que están en riesgo las sesiones extraordinarias
Diputados nacionales señalaron que el cuerpo está prácticamente paralizado por la falta de acuerdos hasta en el propio oficialismo.

Legisladores correntinos en el Congreso advierten que, sin la conformación de comisiones y sin sesiones, el cuerpo se encuentra prácticamente paralizado. De no haber acuerdos, correría peligro de caer gran parte del temario de extraordinarias. Uno de los puntos que preocupa a la oposición es la reforma del Consejo de la Magistratura, ya que sopesa un plazo límite para su promulgación tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia.
"El Congreso se encuentra en stand by porque hay dificultades en la conformación de las comisiones. Hay 18 proyectos enviados por el Ejecutivo que no pueden tratarse", indicó a República de Corrientes la diputada nacional Ingrid Jetter (PRO). Opinó que gran parte de esta situación se debe a la falta de acuerdos en el propio oficialismo después de la renuncia de Máximo Kirchner a la presidencia del bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados.
En la Cámara Baja únicamente se conformó la Comisión de Presupuesto y Hacienda, que integran los correntinos Jetter y Jorge Romero (PJ) para tratar el Presupuesto 2022, que naufragó en diciembre. Sin embargo, los demás equipos de trabajo no pudieron constituirse por lo que se torna imposible avanzar con el temario. Similar escenario se repite en el Senado de la Nación, donde desembocaron proyectos como la reforma del Consejo de la Magistratura.
"El 15 de abril vence el plazo que estableció la Corte para la
conformación del Consejo de la
Magistratura"INGRID JETTER
DIPUTADA NACIONAL
Además, Juntos por el Cambio, que logró ganar terreno en el recinto con las elecciones del 14 de noviembre, solicita la presidencia de la mitad de las comisiones, entre ellas, de áreas clave como Agricultura y Ganadería, y Justicia, según informó la diputada nacional.
Si no hay sesiones, la consecuencia directa es que los proyectos que ingresaron por vía del Ejecutivo para las extraordinarias caerán y deberán volver a ingresar durante el período ordinario de sesiones, el cual se inaugura el 1 de marzo, según indicó la legisladora. Sin embargo, desde lo político, sería una lanza en el costado del oficialismo por no aglutinar los consensos necesarios.
En la trama de las negociaciones se destaca la modificación del Consejo de la Magistratura, órgano del Poder Judicial de la Nación que, entre otras atribuciones, tiene a cargo la selección de magistrados por concurso público, ejercer facultades disciplinarias, administrar los recursos de la Justicia y decidir la apertura del procedimiento de remoción de un juez, entre otras.
En diciembre pasado, la Corte Suprema de Justicia de la Nación declaró inconstitucional su actual composición, producto de una reforma en 2006 impulsada entonces por Cristina Fernández. El máximo tribunal dictaminó un plazo de 120 días para retrotraer la situación.
"El 15 de abril vence el plazo que estableció la Corte Suprema", recordó Jetter el fallo y de allí la premura del tratamiento de un proyecto de ley. El Ejecutivo envió una propuesta de modificación de la conformación del órgano. Ingresó por el Senado en extraordinarias y, según señalaron desde la oposición, no habría acuerdos aun en el oficialismo.
"Si no hay acuerdo, se tendría que volver a la ley original. El problema del oficialismo es que no estaría de acuerdo con que el presidente del Consejo sea el presidente de la Corte Suprema, que es lo que establece la ley original. La discusión no es tanto por la cantidad de integrantes, sino por la presidencia", señaló.
Mientras tanto, la oposición busca acuerdos con otros bloques para avanzar con un proyecto unificado, ya que están en danza varias propuestas. Una de ellas es del senador nacional por Corrientes Eduardo Vischi, que presentó el 3 de febrero en el Congreso. Propone que el órgano esté conformado por 20 miembros.
FMI
Similar diagnóstico esbozó el diputado nacional Manuel Aguirre (UCR). No habría avances en el temario de extraordinarias por la falta de acuerdo dentro del oficialismo nacional.
Sin embargo, para el legislador nacional por Corrientes la renuncia de Máximo sería una suerte de puesta en escena, "una doble jugada" como lo mencionó el representante en la Cámara Baja nacional, para minimizar el costo político al kirchnerismo.
"Por qué Máximo renuncia ahora y no antes. Si el acuerdo con el FMI sale bien, será un logro de Alberto Fernández y le daría paso a su carrera por la reelección en 2023. Si las cosas salen mal, le echarán la culpa de Fernández y a la oposición", esgrimió Aguirre en diálogo con República de Corrientes.
"Nosotros, como oposición, necesitamos leer la letra chica para ver si acompañamos", dijo el legislador correntino. Sin embargo, consideró que es necesario tener en cuenta que Argentina no puede entrar en default.
Uno de los requerimientos del FMI es que el acuerdo tenga aval del Congreso de la Nación. Una de las voces en contra de apoyar el entendimiento con el organismo multilateral fue la de Máximo Kirchner, quien apeló a este argumento para renunciar a la presidencia de la bancada oficialista.
Mientras tanto, en el Senado de la Nación, el correntino Carlos Mauricio Camau Espínola se posicionó a favor de Alberto. "El presidente tomó una decisión y hay que acompañar con responsabilidad y de manera constructiva", dijo ayer a radio Mitre. "Confío en que la discusión interna sobre el acuerdo con el FMI la daremos en el marco de la unidad", añadió.


