Isabel Ríos, una mujer dedicada al servicio y creadora del comedor Corazón Contento
En la actualidad, 135 chicos y 140 adultos comparten el almuerzo y la merienda. Además, el hecho de recibir en su casa a tantas personas la llevó a establecer un vínculo muy fuerte con los vecinos del barrio Patono.

Isabel Ríos tiene 79 años, nació en la localidad de Las Palmas, departamento de Bermejo, en el centro-este de Chaco. Es la fundadora del comedor Corazón Contento y aunque ella misma afirma que se olvida de algunas cosas, su pasión por ayudar a los demás sigue intacta.
El centro comunitario, ubicado en la avenida Argentina, en la zona de las 126 Viviendas, comenzó a funcionar el 25 octubre de 1987. Fue el período de una de las crisis económicas más grandes del país. El malestar social comenzaba a sentirse con huelgas en distintos puntos de Argentina y el hambre fue una de las consecuencias más evidente.
Luego de venir a vivir a Corrientes junto con su marido Ramón, se instalaron en la isla Noguera, frente al arenero que comparten el barrio Patono y el Quilmes. Allí pescaban, cosechaban su huerta y criaban animales. Habitaron la isla hasta que, entre 1981 y 1983, se instalaron en el terreno donde viven actualmente.
"Recuerdo que hacía mucho frío, llovía y había un gran creciente. Lamentablemente, nadie daba nada y había poca comunicación telefónica, solo en el barrio 1.000 viviendas. Así fue como me comuniqué con un periodista y le solicité que publicara la iniciativa para ayudar a los pescadores y ladrilleros que vivían en la zona. Después de una pequeña asamblea con los malloneros, quedé como representante del barrio. A los pocos días llegaron las primeras donaciones: grandes ollas de hierro y alimentos", contó Isabel, en diálogo con República de Corrientes.
"Mi desafío fue tan grande que hasta hoy sigo luchando para que los niños y ancianos tengan un plato de comida. Tengo varias personas que están postradas, gente a quien ni siquiera la propia familia la tiene en cuenta. Yo lloraba de la emoción, y los corazoncitos de los niños, después de almorzar, parece que se iban contentos. De ahí surgió la idea de ponerle al comedor Corazón Contento", recordó.
Al principio no tenían donde servir la comida, pero entre los ladrilleros armaron rápidamente una mesa. El primer día había 40 personas, y luego fueron más de 600. Posteriormente, dejaron de entregarle alimentos y el comedor se sostuvo gracias a las donaciones de la gente. En la actualidad, 135 chicos y 140 adultos comparten el almuerzo y la merienda.
"Hoy estamos igual que en el año 87, seguimos con una crisis terrible, muchas familias pasan hambre y realmente el dinero no alcanza, todos los días aumentan las cosas. Tengo fotografías y recortes de diarios guardados que son pruebas contundentes de mi trabajo en el comedor", expresó Isabel.
"Mi desafío fue tan grande que hasta hoy sigo luchando para que los niños y
ancianos tengan un plato de comida"ISABEL RÍOS
FUNDADORA DEL COMEDOR
Además, reflexionó: "En vez de dar tantos planes sociales por cada hijo, por qué no mejor crear empresas y fábricas para generar empleos. Tal como dice el proverbio chino, regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día; enséñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida."Por otro lado, hay muchos que se enferman y no tienen para pagar los medicamentos. Además, las obras sociales no cubren el 100 % de su valor", agregó.
El hecho de recibir en su casa a tamaña cantidad de niños y niñas que revolotean por el lugar entre juegos y risas, hizo que Isabel estableciera un vínculo muy fuerte con ellos, e incluso con los padres que ahora son adultos que buscan progresar en la vida, y que no olvidan lo que la mujer hizo por ellos.
En otro orden de ideas, este sábado organizan un festejo de los cumpleaños de aquellos niños que asisten al comedor. Por este motivo, solicitan colaboración para llevar a cabo el cumplemés con galletitas, snack, golosinas y torta, además de globos y el cotillón necesario para ornamentar el lugar. Se pueden comunicar al número 379 5069757 o a través de las redes sociales: en Instagram @sictes; y en Facebook Fundación Sí Corrientes.


