Una bibliotecaria que transforma el aprendizaje en un viaje de descubrimiento

En un rincón del Colegio Roubineau, donde los libros susurran historias y las ideas florecen, Nelly Balmaceda es como un faro de luz. Durante 40 años, ha sido más que una bibliotecaria; es una guía que invita a sus alumnos a navegar por el conocimiento. En tiempos donde la tecnología parece dominar, su presencia recuerda la importancia de las conexiones humanas y el valor de la lectura.

Cada día, el sonido de las risas y conversaciones llenan la biblioteca. Nelly creó un espacio donde los estudiantes no solo vienen a leer, sino a soñar y compartir. "Aquí surgen grandes ideas", dice con una sonrisa. La magia de este lugar radica en que los jóvenes pueden discutir sobre ecología, arte y sus propias pasiones, transformando cada recreo en una sinfonía de creatividad.

Además, los alumnos de otras promociones no pueden evitar pasar a saludarla, recordando con cariño los momentos vividos en su compañía. En una reciente entrevista publicada en el Instagram de República de Corrientes, sus antiguos alumnos demostraron en los comentarios todo el amor y la gratitud que le tienen, resaltando la huella imborrable que ha dejado en sus vidas.

Para Nelly, la biblioteca es más que un espacio físico; es su hogar. "Me siento muy a gusto aquí", confiesa. Su amor por este lugar se refleja en cada rincón, donde los libros están cuidadosamente organizados y las actividades están diseñadas para inspirar. Ella ha cultivado un ambiente donde cada estudiante se siente valorado y motivado a explorar su propia creatividad.

Como profesora de artística y maestra en Artes Visuales, Nelly no solo enseña técnicas sino también a expresarse. "Ser docente es ayudar a los jóvenes a conocerse a sí mismos", explica con pasión. A través del arte, les brinda herramientas para que puedan comunicar sus emociones y pensamientos, guiándolos en su búsqueda personal.

 

 "Para mí, ser docente es encontrar en esos jóvenes la posibilidad de que ellos puedan abrir su mente, de conocerse a sí mismos y que encuentren lo que a ellos les apasiona"

NÉLIDA BALMACEDA
DOCENTE Y BIBLIOTECARIA

 

Nelly sueña con que sus alumnos encuentren caminos hacia la paz. "Quiero que construyan un futuro donde se cuiden mutuamente y protejan nuestro medio ambiente", dijo, con firmeza. Su compromiso va más allá de lo académico donde busca formar ciudadanos responsables y empáticos.  A medida que se acerca su jubilación, ella reflexiona sobre su legado.  Cada proyecto que llevó a cabo es una semilla plantada en el terreno fértil de la juventud, esperando florecer en futuros líderes.

La biblioteca se convirtió en un refugio para los estudiantes que buscan respuestas o simplemente un lugar para relajarse y soñar. "Aquí se establecen lindas charlas", comenta recordando momentos especiales compartidos con sus alumnos. Cada conversación es una oportunidad para abrir nuevas puertas hacia el conocimiento y la amistad.

Nelly alienta a sus alumnos a ser curiosos e inquisitivos. Les recuerda que el aprendizaje no termina en las aulas, sino es un viaje continuo que dura toda la vida. "Quiero que encuentren lo que les apasiona", dice con determinación, sabiendo que cada uno tiene un camino único por descubrir.

Con cada pincelada y cada trazo, enseña más que técnicas artísticas; enseña lecciones sobre la vida misma. El arte se convierte en una herramienta poderosa para expresar sentimientos y reflexionar sobre el mundo que nos rodea. Sus clases son espacios seguros donde los estudiantes pueden explorar sus emociones sin juicios.

Mientras mira hacia adelante con esperanza e ilusión, Nelly sabe que su influencia perdurará incluso después de su jubilación. Los valores que ha inculcado en sus alumnos seguirán resonando mucho después de que ella haya cerrado el libro de esta etapa de su vida profesional. Y así, la magia de Nelly continuará viva en cada uno de ellos, guiándolos hacia un futuro brillante lleno de posibilidades infinitas.