Cristina Kirchner cerró filas en el Patria y dio por terminado el debate

En la antesala de una tensa sesión en el Senado, el debate por el proyecto de ficha limpia quedó prácticamente sellado tras una reunión decisiva encabezada por Cristina Fernández de Kirchner en el Instituto Patria.
La expresidenta recibió en la sede ubicada a pocos metros del Congreso a José Mayans, Anabel Fernández Sagasti y Juliana Di Tullio, y allí el kirchnerismo definió su postura frente a una iniciativa que consideran "incompleta".
"Volvieron del encuentro y dejaron en claro que ya estaba todo listo. Que en el Patria entendían que se iba a aprobar", relató una fuente con acceso al bloque oficialista. Aunque se discutieron posibles modificaciones, el mensaje fue claro: no habría más vueltas sobre el tema.
En paralelo, crecía el malestar dentro del PRO. La diputada nacional Silvia Lospennato, autora de uno de los proyectos originales, solicitó ingresar al recinto para presenciar el debate desde los palcos, pero su ingreso fue denegado. "Enviamos una nota pidiendo eso y nos fue negado", expresaron desde su entorno. Junto a ella también fueron excluidos el abogado Gustavo Marra y la periodista Fanny Mandelbaum, impulsores civiles de la iniciativa.
Desde el Senado argumentaron que no había lugar disponible y que "nadie quiere ir a la segunda bandeja" del recinto. Sin embargo, desde el PRO señalaron que Lospennato, aún siendo diputada nacional, tenía derecho a asistir y adelantaron que más tarde se haría presente en el Salón Azul, junto a medios de comunicación.
Mientras tanto, la interna entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA) sumó tensión al debate. Ambos espacios buscan adjudicarse la autoría política de una ley que consideran clave para posicionarse en el electorado porteño, a pocos días de las elecciones. El presidente del bloque PRO, Alfredo De Angeli, aseguró que el proyecto era de su partido, mientras que Ezequiel Atauche, de LLA, afirmó que estaban tratando una versión "mejorada" enviada por el Ejecutivo.
En medio de esta disputa, el kirchnerismo aprovechó para insistir en interpelar a funcionarios como Karina Milei, Luis Petri y Santiago Caputo, buscando exponer lo que consideran una doble vara en los discursos sobre transparencia.
Ficha limpia, una ley que pretende impedir que personas con condenas penales accedan a cargos públicos, se ha convertido en un eje de confrontación política y narrativa entre oficialismo y oposición, pero también en un nuevo capítulo de roces institucionales y operaciones cruzadas dentro del Congreso.
*Con información de Infobae


